Cuatro cuarentones que rocanrolean como adolescentes y para los que el rock es tanto un estilo de vida como una actitud y filosofía. Se hacen llamar The Guapos y juntos suman años de carrera, experiencias, vivencias y facetas artísticas.
Ese es el grupo-proyecto integrado por los mexicanos Jay de la Cueva y El David Aguilar, junto al franco-mexicano Adán Jodorowsky y el español Levya, que recién estrenaron su disco debut “Hey!”, grabado en los estudios Reliable Recorders de Chicago en febrero de 2021.
“Justo en Chicago empezó este proyecto”, recordó El David Aguilar en entrevista con La Voz. “Tenemos una conexión muy bonita y bien poética con la ciudad [porque] ahí grabamos este material que compusimos en casas de la Ciudad de México y se materializó en un estudio increíble donde tradicionalmente se graba rocanrol, lo grabamos en cinta [análogo].
En realidad este disco es un homenaje al rocanrol de los años 60 y 70”, explicó. Un rock que era para la tardeada, para el gozo, para divertirse y no tomarse tan en serio.
A “Hey!”, lo integran diez temas cuyas letras son desde juego de palabras, situaciones divertidas de humor, sarcasmo, como en “Soy un guapo”, “Mis amigos del rock”, “Nunca te quise” y “Objeto sensual”.
Musicalmente y estéticamente, The Guapos ofrecen un viaje de nostalgia que evoca no sólo a grupos como los ingleses de The Beatles, sino también grupos mexicanos como Los Teen Tops o Los Apson, pasando por figuras como Elvis Presley o Enrique Guzmán.
Y claro, la tipografía que usan en el logotipo del nombre del grupo es una referencia directa al grupo mexicano “su majestad”, Los Bukis.
“El proyecto está lleno de referencias, incluso a las canciones de Enrique Guzmán y César Costa, usando ese tipo de lenguaje muy ‘naive’ de los años 60, es una postal desde el 2023 a esos años del rock”, agregó Aguilar.
Esa vuelta al pasado fue hecha de manera documentada, no sólo porque los cuatro “guapos” tienen conocimiento musical, sino por razones personales.
Particularmente en el caso de Jay de la Cueva (Titán, Fobia, Moderatto), la conexión con el rock sesentero le viene de casa. Su papá, Javier de la Cueva, es uno de los precursores del rock en México ya que fue integrante de los grupos Los Camisas Negras y Los Hooligans.
Además de un viaje musical y una celebración al espíritu del rock, para El David de The Guapos es “el pretexto” para encaminar la amistad que surgió entre los integrantes y ver hacia a dónde los llevará cada presentación y todo lo que surja en el camino.
“Es una oportunidad para estar juntos. Nos gusta mucho [a los cuatro] el rocanrol, pero también el arte y estamos contentos con el proyecto, divirtiéndonos mucho. Nos tiene como niños, es pura sorpresa”, agregó.
Por lo pronto, el grupo hizo su debut en el festival Pa’l Norte (Monterrey, México) en abril pasado y recientemente estuvieron en el Festival de Rock Azkena (España), donde permanecerán hasta julio cumpliendo con tres presentaciones más hasta julio y ya anunciaron que el 24 de octubre tocarán en el Teatro Metropolitan de la Ciudad de México.
Sin dejar a un lado cada uno sus proyectos artísticos multidisciplinarios, The Guapos es la ventana para seguir haciendo cosas y esperan presentarse en otras ciudades de México, Latinoamérica y Estados Unidos, tomando el tiempo libre para encaminar posiblemente otro disco del grupo.
Aguilar adelantó que aunque aún no hay fecha, a Chicago tienen que venir, sí o sí.
Por su cuenta, El David, quien dijo no ser del todo “guapo” ni cuando está con el grupo, sino más bien “un traidor secreto”, se encuentra en la producción de su nuevo álbum, justo en el año que celebra ya dos décadas de carrera artística.
Y tiene pendiente el segundo disco de su otro proyecto-dúo, Vacación, que tiene con el cantautor mexicano Caloncho y que espera lanzar en 2024. A la par alista un libro y tiene varias cosas-proyectos y estudios.
“Uno de los rasgos de la actualidad es vivir diversificadamente”, detalló. Es que justo ahora que recién llegó “al cuarto piso” y que ya es oficialmente el cuarentón más joven de The Guapos, El David está entrando a la etapa más madura de su vida artística.
“Chavorrucos lo vamos a hacer siempre de la mano del rocanrol. Se trata de divertirse. Todos vamos a envejecer, pero el rock es una cuestión de actitud”.